¿Por qué es importante invertir con objetivos? 

La decisión de invertir requiere que renunciemos a algunos gastos o gustos en el presente, con el objetivo de poder obtener un rendimiento en el futuro.  

Si bien una persona siempre podrá invertir, incluso sin objetivos concretos, el tener un objetivo claro y preciso tiene beneficios: brinda mayor motivación al inversionista y es más fácil mantenerse disciplinado, ya que el objetivo se convierte en una meta que actúa como una brújula en nuestra toma de decisiones financieras.  

Si una persona tiene el objetivo de invertir para poder dar el enganche de una casa, quizá en lugar de salir a cenar a un restaurante muy lujoso con los amigos, decida invitarlos a su casa a jugar algún juego de mesa, ver una película o simplemente platicar horas mientras toman una copa de vino. Es importante recordar que la diversión no tiene por qué ser cara, mientras que ahorrar e invertir no tienen por qué ser sinónimo de aburrido, solo es necesario ser creativos y buscar otras opciones. 

La inversión sin objetivos puede llevar a la toma de decisiones impulsivas o inadecuadas  

Pasos para definir tus metas financieras.

Para establecer tus objetivos de inversión puedes realizar los siguientes pasos: 

    1. Definir tu objetivo 

En lugar de simplemente decir “quiero ahorrar para invertir” plantea el verdadero motivo: “quiero jubilarme a los 65 años… quiero comprar una casa en la playa en 15 años… quiero comprarme el auto de mis sueños en 5 años… quiero poder pagar la universidad de mis hijos cuando alcancen los 18 años…” metas y sueños hay muchos, pero es importante recordar cuáles son para no dejarnos llevar solo por la vida y los hábitos (o vicios) financieros que tengamos en ese momento.

    2. Cuantificar la meta 

Es importante ser realistas en cuánto al costo de lo que deseamos, ya sea el viaje, la casa, el carro, la universidad. Una casa no costará lo mismo hoy que dentro de uno o dos años, por lo que es fundamental estimar cuánto dinero necesitarás, en qué moneda y si ya cuentas con una parte del capital. De esta manera sabrás exactamente cuánto dinero necesitas para lograr ese objetivo.  

    3. Establecer tu horizonte de tiempo 

Define plazos reales para cumplir tus metas. Es importante que, al momento de establecer tu objetivo y el costo del mismo, revises tu situación financiera y calcules aproximadamente cuánto dinero podrías invertir quincenal o mensualmente, y cuánto tiempo, aproximadamente, podría llevarte lograr la cantidad que necesitas.  

    4. Prioriza tus metas 

Una vez que hayas definido todas tus metas catalógalas de acuerdo a la urgencia o importancia para ti. Quizá el auto de ensueño puede esperar un año, pero el pago de la primera colegiatura universitaria está próximo. Define en cuál o en cuáles objetivos te enfocarás primero y poco a poco podrás cumplirlos todos. Ojo, la recomendación es no tener más de tres objetivos a la vez, ya que al tener muchos el esfuerzo para cada una se diluye y puedes tardar más tiempo en alcanzarlos, lo que podría generar desmotivación o pérdida de interés. 

    5. Elige instrumentos adecuados de acuerdo al objetivo y el plazo del mismo 

Una vez que has definido, priorizado y determinado el horizonte de tiempo para alcanzar tus objetivos, es necesario escoger los instrumentos financieros más apropiados para cada uno. Si tu meta es a más de 5 años (largo plazo), quizá el mejor instrumento de inversión serán acciones, ETFs, o fondos indexados, mientras que si tu meta es a muy corto plazo (menos de un año) lo mejor podría ser fondos de deuda, deuda comercial o CETES. Recuerda que cada meta podría tener un plazo diferente, por lo que los instrumentos para cada uno podrían variar, busca cuál es mejor para cada uno de tus objetivos.  

    6. Revisión periódica  

Nuestra situación económica puede ser cambiante, ya sea que nos dieron un aumento, un bono, o nos quedamos sin empleo. Es importante que periódicamente revisemos tanto nuestra situación económica, para ver si podemos seguir aportando lo mismo a nuestras metas, como nuestros gastos y objetivos, ya que nuestras prioridades pueden cambiar con la llegada de un hijo, la oportunidad de estudiar una maestría, o simplemente las sorpresas que da la vida.

Invierte con propósito y asesoría profesional 

Invertir con objetivos claros no solo incrementa tus posibilidades de éxito financiero, sino que también te permite tomar decisiones más conscientes, alineadas con lo que realmente deseas. Recuerda: tus metas pueden cambiar, pero tener un plan flexible y bien diseñado será tu mejor aliado para alcanzarlas.

Invertir sin una meta es como viajar sin un destino. Define tus sueños y deja que tus inversiones te acerquen a ellos.

¿Quieres lograr tus metas con un plan hecho para ti?

👉 Conoce nuestro servicio de Inversión con un objetivo